Un millonario excéntrico organiza cenas temáticas el primero de cada mes. Pero, en la última cena, aparece un cadáver que no estaba invitado. ¿Arruinará la velada?
***
Lord Mariano Chin Pum organizaba su cena temática como cada mes, solo porque su mayordomo Gregorio no le dejaba adoptar más gatos. Esta vez el tema era "Asesinato a las ocho". Y a las ocho en punto cayó el cadáver.
—¡Maravilloso! —exclamó Mariano, con su copa de cava en la mano—. ¡El autor de este detalle tan realista merece un Óscar o dos!
—¿Alguien ha probado los canapés? —preguntó Lady Mermelada, mientras examinaba el cadáver con su monóculo.
Los invitados, una mezcla de aristócratas, artistas sin talento y un tipo extraño que decía ser "influencer de misterio", se miraron entre ellos. Nadie parecía reconocer al muerto.
—Gregorio, ¿Invitamos a este señor? —preguntó Mariano, registrando los bolsillos del cadáver por si traía cigarrillos.
—No milord. Solo enviamos 17 invitaciones. Este sería el número 18. O un polizón. O quizás un espíritu vengador.
Mariano aplaudió.
—¡Un espíritu vengador! Maravilloso. ¿Se dan cuenta? ¡Ni Hitchcock llegó tan lejos!
Gregorio carraspeó.
—Señor... temo que el muerto es real. No respira, no parpadea. Y tiene una pierna de plástico.
—¡Vaya! Tenemos un cadáver con detalles artesanales.
Mientras tanto la señorita Rosa Mosqueta, experta en flores venenosas, husmeaba alrededor del cuerpo.
—Esto no es sangre —dijo, mojando el dedo y probando—. Es ketchup. ¡Y del barato!
La sala enmudeció. El pianista dejó de tocar. Todos sabían que en casa de Lord Mariano, usar ketchup barato era un sacrilegio gastronómico. El chef había desaparecido por usar mayonesa con almidón.
Mariano se quitó el sombrero de detective y miró a sus invitados.
—Bien. Hasta que se resuelva este misterio, nadie podrá marcharse. Gregorio, cierra las puertas y trae más cava.
Entonces Lady Mermelada lanzó una pregunta perturbadora:
—¿Y si el asesino está entre nosotros?
Mariano sonrió y un silencio espeso se coló en la habitación. Incluso el cadáver pareció incómodo.
Se creó un comité improvisado de investigación: Rosa Mosqueta, por su habilidad con los venenos; el influencer, por su habilidad con los selfies; y Gregorio, porque era el único con sentido común en esa cena de locos. Observaron la escena y descubrieron que:
1. El cadáver tenía una entrada a nombre de Pablo Cosquillas.
2. Pablo era crítico culinario y había publicado una reseña horrorosa sobre los canapés de Lord Mariano, llamándolos, "insultos al paladar".
—¡Ajá! Entonces fue usted —acusó Rosa Mosqueta—. ¡Usted tenía un motivo!
—¡Por supuesto que tenía uno! —respondió Mariano furioso— pero eso no significa que haya ensuciado mi alfombra persa con sangre de ketchup. ¡Por favor! yo tengo clase.
Entonces el cadáver estornudó.
—¡Está vivo! —gritó Gregorio.
—¿Dónde estoy? —susurró el hombre, incorporándose con una cierta torpeza—. ¿Esto es... foie gras?
Pablo Cosquillas despertó confundido.
—Me dieron un canapé, lo probé, insulté a alguien y luego todo se volvió rojo.
El influencer le preguntó por la nota de su espalda, transmitiendo en vivo.
Pablo la leyó confundido.
—Ah, esto... Esto lo escribí yo. Era una crítica. Me quedé dormido escribiéndola. ¿Donde está mi cuaderno?
Mariano suspiró aliviado.
—Gregorio, cancele la autopsia.
Esa noche, nadie resolvió el misterio del ketchup barato, pero todos brindaron por Pablo, que había vuelto del más allá.
Y por supuesto Lord Mariano ya pensaba en su próxima velada: "Crimen y castigo con chocolate".
Nota: Este relato es un guiño a la película "Un cadáver a los postres" y participa en el reto de junio sobre "Relatos anónimos" del Tintero de Oro.
¡Enhorabuena, Dakota!
ResponderEliminarFlipé con este texto cuando lo leí entre los anónimos, de nota; es saladísimo, ¡humor del bueno!
Un abrazo y feliz verano :)
Gracias Maite, creo que no había probado con este tipo de relato nunca. Me gustó la película Un cadáver a los postres cuando la vi y probé con ese tipo de humor absurdo.
EliminarUn abrazo y feliz verano también para ti🌹🤗
Creo que con este original relato te has graduado, muy creativo y ameno. Te felicito, Mari.
ResponderEliminarBesos dulces y dulce fin de semana.
Gracias Dulce, un palo que no había tocado aún, jaja.
EliminarBesos dulces para ti🌹
Hola, Dakota, una velada al estilo Agatha Christie, aunque con su toque de humor. Lo de la sangre de ketchup, del malo, y los nombres de los personajes, genial. Muy acertado y muy apropiado para el reto del Tintero. Enhorabuena por él.
ResponderEliminarUn abrazo. :)
Hola Merche, una velada de humor absurdo, jajaja. Gracias, me alegro que te haya gustado.
EliminarUn abrazo 🤗
Hola Dakota, me ha parecido un relato muy bueno, con ese toque de humor brilla. Me gustó mucho. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias Nuria. Un abrazo para ti🤗🌹
EliminarHola... Excelente y divertido relato que me hizo recordar las obras de Agatha Christie y al buen Hércules Poirot.. saludos!
ResponderEliminarGracias Octavio, no es mi registro habitual, no sabía cómo quedaría.
EliminarUn saludo 🌹
Este cadáver tiene más vida que muchos vivos, Mari.
ResponderEliminarNo sé qué me ha gustado más: si el desmayo con ketchup de saldo, el mayordomo con más sentido común que toda la aristocracia junta, o ese Lord Mariano que organiza cenas criminales solo porque no le dejan adoptar más gatos. ¡Me encanta de principio a fin!
Te has lanzado de cabeza al humor absurdo con una soltura que parece llevas toda la vida haciéndolo. El ritmo, las frases cargadas de doble sentido, las situaciones que bordean lo delirante sin perder elegancia… En serio, es como si Wodehouse y Agatha Christie hubieran decidido escribir juntos después de un par de copas.
Te has graduado con honores en el arte del desmadre narrativo con clase.
Brindo con cava (del bueno, que en casa de Mariano no se juega) y ya reservo sitio para la cena de “Crimen y castigo con chocolate” jeje.
Un abrazo fuerte, compañera.🤗🤗
Hola Miguel, jajaja, creo que es la única temática que no había tocado, por eso iba bien para este reto de anonimato, además que el humor absurdo me parece un tanto complicado plasmarlo. Pero bueno, vi por enésima vez un cadáver a los postres y leí varios relatos de esta guisa para ver por donde tirar. Y lo más difícil, cada vez que ee presentaba una musa la apuntaba, jajaja. Pensaba que no me iba a dar tiempo presentarlo.
EliminarUn abrazo grande maestro🌹
Siempre tengo tus tutoriales muy presentes, que conste.
Muy divertido, una puesta en escena, impecable. ;)
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Alfred.
EliminarUn abrazo 🌹
Buenas Dakota!
ResponderEliminarMe ha encantado la historia, me ha recordado un poco al Cluedo y los nombres son geniales, se salen!!
Me estáis sorprendiendo mucho con esto de los textos anónimos, os habéis ocultado de maravilla eh?.
Me ha encantado tu lado detectivesco surrealista jajajaj
A ver con que nos sorprendes para la próxima. Me encanta entrar en tu blog amiga, cada vez te encuentras algo distinto. Eres toda una todoterreno.
Un abrazo y un poco de chocolate, para la próxima
Hola finil, para pasar por anónimo nada como escribir algo que nunca has escrito, jajaja, "Un cadáver a los postres", es la película que yo tomé como referencia, y tuve que leer sobre humor absurdo para crear un poco ese diálogo de besugos como suele decirse.
EliminarUn abrazo grande y una 🍫 que por cierto ya lo tengo en mente para un artículo, el chocolate y sus beneficios. Ya me has dado una idea para Miradas, jajaja.
Hola Dakota, un relato divertido, con personajes extravagantes que se lee de corrido y deja una agradable sensación después de leerlo. Enhorabuena.
ResponderEliminarGracias Ana, humor absurdo para hacer reír, y totalmente fuera de mi registro.
EliminarAbrazo🌹