Esta convocatoria viene de la mano de Dorotea, el tema es "la gratitud", podéis ver los relatos de los participantes en su blog
Lazos y Raíces. A continuación mi aportación a esta convocatoria.
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Aquellas tardes de verano eran especiales, las mejores vacaciones que podíamos tener. Recuerdo esos juegos en el patio de atrás, esa fragancia a rosas y jazmín, como nos subíamos al limonero, jugábamos al escondite y nos columpiábamos hasta la hora de merendar. Que bien sabían esas catalanas que nos preparabas, cuando nos llegaba el olor del pan tostado, subíamos corriendo la escalera del patio. Después de merendar nos llevabas a dar un paseo y a veces cogíamos una película del videoclub para verla al volver a casa. Cuantos recuerdos, como nos cuidabas, ahora te veo y me digo que injusta ha sido la vida contigo, coges mis manos, te doy un beso y me pregunto donde estarán tus recuerdos, se perdieron por tu mente, veo tus ojos tristes y pienso si seré otro borrón más en tu memoria.
Ahora soy yo quien te cuida, quien te acompaña a pasear, quien te ayuda a comer, así te muestro mi gratitud. Porque tu me enseñaste lo que es el amor incondicional.
Dakota©️
El amor que se dan con sinceridad se siembra en el corazón de quién recibe, para luego multiplicarse dándose nuevamente con gratitud. Bella historia. Un saludo desde el sur
ResponderEliminarAsí es Mónica, no hay nada como dar todo el amor que un día recibiste. Me alegro que te haya gustado. Un saludo desde Murcia.
EliminarQué maravilla! Bonito relato que nos hace percibir ese aroma a rosas y jazmín y sobre todo esa ternura y gratitud.
ResponderEliminarLos abuelos/as son muy importantes en esta vida y tu se lo estás agradeciendo con el amor y cuidados que entonces volcó sobre ti.
Abrazos.
El amor de los abuelos es especial, incondicional, del amor más sincero que recibimos.
EliminarOtro abrazo para ti.
Lo más triste de todo es que la abuela ya no pueda entender tu ayuda actual.
ResponderEliminarEl amor de los niños por los abuelos es precioso, tanto como el inverso
Besoss Dakota
Creo que en el fondo se dan cuenta de todo el cariño que les das, estoy de acuerdo contigo, el amor entre abuelos y nietos es de lo más sincero y bonito. Besos Gabiliante.
Eliminarsomos la memoria de nuestros hijos, como fuimos la de nuestros padres.
ResponderEliminarEs de ser agradecido recoger los testimonios que compartimos con nuestros antecesores y disfrutarlos por que ese amor era desinteresado. Un abrazo
Amor desinteresado, sincero, incondicional, hay que vivirlo y disfrutarlo. Un abrazo.
EliminarHola Dakota, eres nueva para mi. He leído tu comentario en mi blog, que te agradezo, he venido y me encuentro con un relato tan emotivo como tierno y bonito. He disfrutado con la lectura.
ResponderEliminarYo participo con cierta frecuencia en la convocatoria de los jueves, tengo más actividades este curso, pero estaremos en contacto. Me quedo contigo, con tu permiso, será más fácil seguirte cuando publiques.
El agradecimiento es la puerta principal de las demás virtudes, creo yo.
Un abrazo.
Hola Franconetti, llevo poco tiempo con este blog y es la segunda vez que participo en los relatos de jueves, me ha gustado y lo haré cada vez que pueda. Yo también me quedo contigo, siguiendo tu blog, me alegro que te haya gustado mi aportación, encantada de leerte, ciertamente creo que si, que la gratitud es la puerta a otras virtudes.
EliminarUn abrazo.
Me ha gustado tu relato esta lleno de ternura y sensibilidad. El amor de los abuelos es infinito y sin pedir nada a cambio, pero es de ley hacer con ellos y darle el mismo cariño que una vez ellos nos dieron. Un abrazo y te felicito me ha gustado mucho.
ResponderEliminarHola Campi, un amor incondicional y que se disfruta muchísimo. Un abrazo y gracias.
EliminarHola Dakota, te leo por primera vez y es un placer hacerlo. Un relato precioso. Un abrazo
ResponderEliminarHola Esther, encantada de leerte a ti también, me alegro que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarYo también me quedo contigo. Te vi en mi blog, y hoy me toca opinar sobre tu relato...Amor incondicional, entre los de la sangre de su sangre. ¡
ResponderEliminarPrecioso, 💚 Enhorabuena.
Un abrazo y feliz fin de semana.
Los abuelos, ese amor incondicional que perdura en el tiempo, yo también te sigo de cerca, este relato tiene un bonito significado para mí, me alegra que te guste. Gracias por comentar, un abrazo 🌹
EliminarPrecioso relato, y es que sembrar alegría ya mor, siempre acaba saliendo bien.
ResponderEliminarUn abrazo, te seguiré.
Hay personas que se olvidan de lo que un día sus mayores hicieron por ellos, y se debería agradecer más, nuestros abuelos, nuestros padres, es de ley agradecer lo que un día hicieron por nosotros.
EliminarUn abrazo, ya te sigo.
Creo que este es tu segundo relato, Dakota y te felicito. Me ha enternecido y hecho reflexionar. Actualmente y cada vez más, no nos damos cuenta que los abuelos son muy importantes y tendemos a no valorar sus aportaciones. Una lástima.
ResponderEliminarNos vemos.Un beso
Así es bluechance, es la segunda vez que participo, y he querido aprovechar el tema propuesto para dedicarlo a ellos, a nuestros mayores. Me alegro que te haya gustado. Un beso 😘
EliminarUna gratitud que entiendo a la perfección: aunque sean esfuerzos, tiempo y dedicación...¡qué lujo el poder devolver un poquito de los desvelos, cuidados y atenciones recibidos en su momento! Gracias (!) por participar!
ResponderEliminarBuenos días Dorotea, todo un lujo dar aunque sea una parte de lo que un día ellos nos dieron, atención y cuidados. Gracias a ti por comentar, el tema me encantó.
EliminarUn abrazo 🌹