En este reto nos proponen que seamos malos con Miguel y le hagamos tener un mal día.
A tener en cuenta una sola condición, terminar el relato con esta frase :
"... Solo deseaba montarse en su coche y refugiarse en casa y con lágrimas en los ojos, descubrió que alguien le había pinchado las ruedas."
Comenzamos...
* * * * *
Esa mañana Miguel presentía que iba a tener una mañana nefasta. Nada más levantarse tropezó y se dio un golpe en la frente al caer, fue al baño para echarse agua en ese morado que cada vez se inflamaba más, parecía que en su frente tenía un huevo de codorniz, al abrir el grifo el agua salió con tal presión que se mojó todo el pantalón.
Se dirigió a la cocina para preparar el desayuno, el café se salió de la cafetera, las tostadas se quemaron.
- Esto no va nada bien, pensó.
Al salir de casa pisó un charco y con el traspié se le cayó el móvil (que más puede pasarme hoy).
Cogió el coche y se dirigió a la oficina, estaba confeccionando un informe cuando la luz se fue, el generador de emergencia falló y su pc se apagó perdiendo todo el trabajo, tendría que volver a empezar, lo que le ocasionaría salir más tarde. Llegó la hora del almuerzo, siempre almorzaba en la misma cafetería, quedaba al lado de la oficina, ese día había una camarera nueva y un tanto torpe que le tiró la coca cola sobre el pantalón, estaba deseando volver a la oficina y acabar el informe.
Por fin llegó la ansiada hora de salida, después de ese nefasto día "solo deseaba montarse en su coche y refugiarse en casa, y con lágrimas en los ojos descubrió que alguien le había pinchado las ruedas".
Dakota©